11 de septiembre de 2019
Esta es la segunda de una serie de entrevistas con embajadores de los Jueves de Negro, que desarrollan un rol vital para aumentar el impacto de nuestro llamado colectivo hacia un mundo sin violaciones ni violencia.
El reverendo Chris Ferguson es Secretario General de la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas.
¿Por qué decidiste unirte a Jueves de Negro?
Rev. Ferguson: La Comunión Mundial de Iglesias Reformadas ha percibido con mucha claridad que la violencia hacia las mujeres es algo que debemos colocar en primer plano como totalmente ajeno a la voluntad de Dios. Las personas no deben ser discriminadas, mucho menos lastimadas, destruidas o violadas por causa de su género. No hay forma de seguir al Dios de la vida y al mismo tiempo tolerar o ser cómplices desde nuestras teologías y nuestras acciones de la violencia hacia las mujeres. La teología cristiana se ha utilizado para crear las condiciones que posibilitaron justificar y apoyar tanto la violencia directa como indirecta y la discriminación hacia las mujeres.
La comunidad de fe a la que pertenecemos, cree que hay un imperativo especial que no permite que nuestra teología ni nuestras prácticas en la iglesia admitan cualquier tipo de violencia, incluida la violencia de la exclusión o de la supremacía, que sostienen que los hombres son más importantes que las mujeres. En mi opinión, las interpretaciones bíblicas, desde nuestras teologías, están totalmente en contra de la violencia de género. Pero nuestra historia va en otro sentido. Nosotros, por ejemplo, estamos esforzándonos mucho en torno a los problemas de la plena inclusión de las mujeres en el ministerio, por lo cual, no permitir la ordenación de las mujeres, también es, para nosotros, una forma de violencia.
Otra respuesta se relaciona más con mi ministerio. Desde mi época de trabajo con la juventud, pasando por mi tiempo como misionero en América Central en el contexto de tres guerras civiles hasta mi experiencia como capellán del campus, enfrenté la realidad en todas sus variables, desde la violación como arma de guerra hasta la prevención del suicidio. Estas experiencias me enseñaron que las mujeres y las niñas son particularmente susceptibles a la violencia.
Una tercera respuesta es: soy padre de una hija y, por medio de su experiencia, me he sensibilizado profundamente.
Por lo tanto, me expreso como padre, como ministro y como líder de una organización cristiana mundial, todo esto desde mis propias convicciones personales y mi propia espiritualidad.
Uno de las mayores desviaciones en relación a este tema en nuestro mundo se da con la cuestión de la supremacía y su justificación religiosa, que ataca particularmente a las mujeres. Y esto se pone cada vez peor, no mejor, por la manera en que se ha caracterizado al género. Nuestro desafío ahora es confesar al Dios de la vida en medio de un mundo que ha caído en manos de ladrones. Por lo tanto, deseamos que todos y todas se despierten y, cada día, como parte de su espiritualidad cristiana, puedan decir: «este mundo no está como Dios lo quiere y puede y debe ser cambiado».
¿Qué significa para usted hacer una declaración pública todos los jueves en las redes sociales respaldando los Jueves de Negro?
Rev. Ferguson: Los jueves me visto de negro y, a la vez, me visto con una actitud que durante toda la semana me recuerda que tengo una responsabilidad, no solo por cómo actúo y ejerzo mis privilegios, sino también por las implicaciones sociales y políticas como líder cristiano. Entiendo que el papel de un embajador es modelar y animar a las personas a unirse explícitamente al movimiento, para asumir que no es suficiente vestirse meramente de negro. Como hombre blanco mayor asumo mi parte al vestirme de negro, y apoyo lo que otras personas están haciendo. Pero eso no es suficiente a menos que los hombres asuman un liderazgo activo. La transformación vendrá, y ha venido del liderazgo de las mujeres, pero debemos ser aliados agudos y firmes.
Si echan un ojo a mis breves publicaciones, verán que siempre se refieren a lo que somos: estamos a favor de un mundo en el cual las mujeres y las niñas y los niños estén libres de violencia. Abogamos por un mundo libre de violencia, por lo que creo que cada jueves se convierte en un momento muy energético, que me llena nuevamente de determinación, afirmando que es algo en lo que podemos y debemos estar.
¿Cuál sería su mensaje para las personas que aún no participan de los Jueves de Negro?
Rev. Ferguson: Las mujeres son sistemáticamente abusadas y violadas, y es parte de una estructura pecaminosa injusta y pecaminosa. No se puede negar esto. Hay muy pocas personas que puedan presumir de un verdadero sentido de equidad hacia las mujeres, por lo que siempre hay situaciones de poder y de violencia económica.
Por ello, lo primero que digo es «despierta y ve cómo es este mundo». Dios nos ha creado iguales a todas las personas, sin embargo, esta realidad no se visibiliza en ninguna parte. No conozco a ninguna iglesia que lo haya logrado, no sé de algún gobierno que haya acertado. Creo que la cuestión fundamental de la violencia hacia las mujeres, sinceramente, se trivializa o se convierte en un programa de chismes. Y no es cuestión de este tipo de programas, sino de algo más fundamental: cómo la familia humana ha caído fuera del sendero de un modo que impacta, de una manera escandalosa. Asuma esto en diferentes niveles: sea un padre, una madre que se ocupe, sea una hermana o un hermano para su hermana, sea una persona que defienda la vida y la justicia.
Para obtener más información sobre embajadores de Jueves de Negro, comuníquese con media@wcc-coe.org.