“Ya hemos invertido bastante tiempo en consultas para articular maravillosos y coherentes pensamientos sobre la creación. Proclamar un Día de la Creación, una Fiesta de la Creación, es apenas un pequeño paso. Utilizarlo como un llamado a la acción basada en la fe es el llamado más importante que podemos hacer”, afirmó Setri Nyomi, secretario general interino de la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas (CMIR) durante su presentación en la conferencia Fiesta de la Creación y Misterio de la Creación, que se desarrolla en Asís, Italia, entre el 15 y el 16 de marzo de 2024.
Participando del panel ecuménico titulado “La génesis y el florecimiento de la Fiesta de la Creación”, Nyomi expresó que el compromiso de la CMIR con el cuidado de la creación se basa en las Escrituras.
“Los seres humanos fueron llamados más bien a la mayordomía, que incluye disfrutar y vivir en armonía con las demás creaciones de Dios. La caída lo distorsionó todo”, manifestó. “Pero hemos asistido a un aumento astronómico de esta distorsión, sobre todo en los dos últimos siglos, en los que, bajo la influencia de fuerzas sociales y económicas corruptas, se ha evidenciado una falta de respeto tan flagrante hacia todo lo creado, que ha derivado en la injusticia climática que padecemos ahora y en un rumbo hacia la autodestrucción”.
Señaló que hace 500 años “Juan Calvino tenía mucho que decir sobre nuestro cuidado del medio ambiente”, citando varios pasajes de un sermón predicado por el Reformador:
Hoy en día, esa crueldad es aún mayor entre quienes se llaman cristianos… Pues hoy en día se dedican a sofocar y a quemar la tierra, lo cual es peor que degollar a alguien… El ser humano se ha alejado de Dios y, como consecuencia, se ha embrutecido.
Cuidémonos, entonces, de no arrancar ningún árbol frutal. Por el contrario, dado que la Palabra de Dios es semilla de vida, procuremos esparcirla ampliamente, para que eche raíces fuertes y produzca un árbol que no sea infructuoso, sino que produzca mucho fruto. Dios nos ha elegido como su pueblo, revelándonos así una justicia que debe impregnar toda nuestra vida.
Seguidamente, Nyomi indicó el compromiso actual de la CMIR con la justicia climática, articulado en la Confesión de Accra: “Con nuestro compromiso de mucho tiempo con la justicia, no separamos la justicia económica de la justicia climática. En la Confesión de Accra, ese vínculo es muy claro en varios lugares. En el párrafo 5, señalamos: ‘Hemos escuchado que la creación sigue gimiendo, en cautiverio, esperando su liberación (Ro 8:22). El clamor de las personas que sufren y las heridas de la creación misma nos están cuestionando. Observamos una convergencia drástica entre el sufrimiento de las personas y el daño hecho al resto de la creación’”.
“Convocamos de manera constante a nuestras iglesias miembros para que hagan de este compromiso una parte integral de la misión a la que se nos ha llamado, afirmó.
Otros miembros del panel fueron representantes de la Comunión Anglicana, la Conferencia de Iglesias Europeas, la Federación Luterana Mundial, la Iglesia Católica Romana, el Consejo Mundial de Iglesias y el Consejo Metodista Mundial.
Personas procedentes de diversas partes del mundo participaron de la conferencia. Por la CMIR participaron también Hanns Lessing, secretario ejecutivo de comunión y teología; Philip Vinod Peacock, secretario ejecutivo de justicia y testimonio; Ernst Conradie, de la Universidad del Cabo Occidental (Sudáfrica), y Claudio Carvalhaes, del Union Theological Seminary (Nueva York).
La conferencia fue organizada por la Plataforma de Acción Laudato Si’, un espacio compartido en el cual la Iglesia desarrolla una respuesta firme y activa a la crisis ecológica, urgentemente ilustrada en la encíclica Laudato Si’ del Papa Francisco.
La tarea de justicia de la CMIR cuenta con el apoyo del Consejo para la Misión Mundial y el Otto per Mille.